La noche se desviste de estrellas,
en dulce aroma de primavera,
y tu imagen o bella Madre
descuelga como las flores
de un jardín colgante.
Son tres las velas que alumbran tu imagen
silenciosa y viva
Mientras la llovizna cae indiferente,
como los cantos de las aves
cuando el sol es ya durmiente.
Me pongo de pié y miro tu sombra
delicada y brillante,
lanzo como un niño mi sonrisa
y bajo tu manto me refugio
llevándote en mis manos un ramo de versos.
(Mao)
19.4.07
MARIA MADRE
Publicadas por Armonía Espiritual a la/s 4/19/2007 08:59:00 p. m.
Categorías: RINCON POETICO
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